Hoy quiero compartir con vosotr@s una entrada acerca de la Inteligencia Cardíaca, la Inteligencia del Corazón.
Estamos viviendo un momento histórico sin precedentes a muchos niveles y en el plano de la Conciencia y de la Ciencia, la integración,la ampliación de la mirada, el surgir de un nuevo paradigma y en definitiva, de una nueva Conciencia, es un hecho fascinante y palpable.

¿Por qué digo esto?, pues porque el corazón ha sido el centro más importante en diversas tradiciones místicas y en civilizaciones milenarias y hoy día vuelve poco a poco a ocupar el lugar que realmente le corresponde.

Empecemos con las sabias tradiciones:

En el Antiguo Egipto, en la que se le llamó IB, era considerado una de las partes más espirituales del ser humano, así como la sede del pensamiento, la memoria la inteligencia, el valor, la fuerza, el lugar donde mora el Dios-Diosa interior. 
En un texto de los sarcófagos se puede leer: » Yo puse tu corazón en el interior de tu cuerpo para ti, para que tú puedas re-cordar( volver a pasar por el corazón) lo que has olvidado».

En Medicina China el corazón es considerado el órgano en el que se asienta la energía vital, el Chi, y lo distribuye por todo el cuerpo. Se le llama Shen: alma; su emoción es la alegría y le encanta la paz. Así mismo es el encargado del pensamiento y es mente, en el sentido occidental del término. Coordina e integra la vida emocional y mental en un todo individual y define al yo.

En el Sufismo el corazón es el secreto, el SIRR, es el corazón espiritual, místico, sin el cuál el ser humano no puede contactar o percibir. El sendero sufí es un viaje que conduce al corazón y éste es la cámara secreta en la que el amante ( el caminante) y el amado ( la divinidad) se unen en el éxtasis.
En el corazón no existe la dualidad, amante y amado están siempre unidos.

En el Hinduismo el cuarto chakra, Anahata, es considerado el centro del sistema energético unificando las energías materiales con las espirituales. Cielo y tierra se encuentran en el corazón. Shiva y Shakti (conciencia y energía) se unen en él.
En los textos antiguos se dice que: «conoce pasado, presente y futuro, tiene clariaudiencia y clarividencia y puede caminar por el aire cada vez que lo desea».

Y desde la Ciencia empezamos a entender que esa víscera, ese órgano que bombea sangre, tiene más importancia de la que ya le damos.Toda esa sabiduría milenaria fascinante y hermosa, adquirida de modo directo, experiencial e intuitiva, mira con curiosidad a Occidente en su nuevo afán de hermanar los misterios con el laboratorio.

Para comenzar, una frase de Pascal que me resuena mucho ya que en su día a mi me llegaron palabras similares en un momento de gran insight:
» El corazón tiene razones que la razón no entiende»

¿Y qué estamos descubriendo?, pues desde la neurocardiología se ha demostrado que el corazón posee una forma de inteligencia diferente a la del cerebro y que aunque ambas se complementan, el que dirige la orquesta es el corazón. Éste posee su sistema nervioso, es el llamado cerebro en el corazón, compuesto por más de 40.0000 neuronas, un sistema nervioso independiente y con una compleja red de neurotransmisores y proteínas. El 65% de las células que lo componen no son musculares sino neuronales.
El corazón es inteligente porque puede tomar decisiones y pasar a la acción independientemente del cerebro.Puede aprender, recordar y percibir ( ¿os suenan estas funciones?; mmmh yo diría que algo similar hemos leído un poco más arriba, ja, ja).
Cuando usamos el cerebro del corazón, se crea un estado de coherencia biológica, todo se armoniza y funciona correctamente. Es una inteligencia superior que se activa a través de emociones positivas.

Para acabar por hoy comparto una frase de Rudolph Steiner, gran visionario:
» El mayor descubrimiento de la Ciencia del siglo XXI será que el corazón no es una bomba, sino muco más y el gran desafío será permitir al corazón, enseñarnos a pensar de un modo nuevo».

Otro día seguimos con una nueva entrada este apasionante tema de la Inteligencia del Corazón.

                               



                                          GRACIAS  

                                                 🙂






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